El Pecorino Romano DOP es un queso con Denominación de Origen Protegida, símbolo de la tradición quesera italiana, producido exclusivamente en Lazio, Cerdeña y la provincia de Grosseto. Sus orígenes se remontan a la época romana, cuando el Pecorino Romano era un alimento básico para el ejército, valorado por su larga conservación y alto valor nutritivo. Se dice que cada legionario recibía una ración diaria de una onza (aproximadamente 27 gramos), acompañada de sopa de farro y pan, como relata Virgilio. Hoy, el Pecorino Romano es reconocido por su sabor salado y aromático, que se intensifica con la maduración. Aspecto: Forma cilíndrica con corteza fina de color marfil claro, a veces tratada con protectores alimentarios de color neutro o negro. Pasta compacta o ligeramente agujereada. Aroma: Intenso y característico, con notas aromáticas profundas que evocan la tradición quesera ovina. Sabor: Aromático y salado, con un ligero picante que aumenta con la maduración, ofreciendo un perfil gustativo complejo y decidido. Consistencia: Pasta dura y cocida, con estructura sólida y granulada que se presta perfectamente para rallar o cortar. Diámetro de la forma: 30 cm. Maridajes recomendados: miel de eucalipto, perlas de vinagre balsámico de Módena IGP, compota de cebolla y vinagre balsámico de Módena IGP, gelatina de vinagre balsámico de Módena IGP, crema de vinagre balsámico de Módena IGP y trufa, puré de peras, mostaza fina de Carpi, cerveza ámbar y corpulenta como una Belgian Dubbel, vinos como Cannonau de Cerdeña, Chianti o Vermentino, pan casero o focaccia simple. Perfecto rallado sobre platos de pasta como carbonara y amatriciana, o para disfrutar solo al final de la comida, acompañado de nueces y frutos secos para un toque final rústico y rico. Cuchillo recomendado: cuchillo almendra, ideal para romper la pasta dura y granulada del Pecorino Romano, garantizando porciones precisas sin desmenuzar la estructura.
Gastos de €19,90, gratis a partir de €75,00
El Pecorino Romano DOP es un queso con Denominación de Origen Protegida, símbolo de la tradición quesera italiana, producido exclusivamente en Lazio, Cerdeña y la provincia de Grosseto. Sus orígenes se remontan a la época romana, cuando el Pecorino Romano era un alimento básico para el ejército, valorado por su larga conservación y alto valor nutritivo. Se dice que cada legionario recibía una ración diaria de una onza (aproximadamente 27 gramos), acompañada de sopa de farro y pan, como relata Virgilio. Hoy, el Pecorino Romano es reconocido por su sabor salado y aromático, que se intensifica con la maduración. Aspecto: Forma cilíndrica con corteza fina de color marfil claro, a veces tratada con protectores alimentarios de color neutro o negro. Pasta compacta o ligeramente agujereada. Aroma: Intenso y característico, con notas aromáticas profundas que evocan la tradición quesera ovina. Sabor: Aromático y salado, con un ligero picante que aumenta con la maduración, ofreciendo un perfil gustativo complejo y decidido. Consistencia: Pasta dura y cocida, con estructura sólida y granulada que se presta perfectamente para rallar o cortar. Diámetro de la forma: 30 cm. Maridajes recomendados: miel de eucalipto, perlas de vinagre balsámico de Módena IGP, compota de cebolla y vinagre balsámico de Módena IGP, gelatina de vinagre balsámico de Módena IGP, crema de vinagre balsámico de Módena IGP y trufa, puré de peras, mostaza fina de Carpi, cerveza ámbar y corpulenta como una Belgian Dubbel, vinos como Cannonau de Cerdeña, Chianti o Vermentino, pan casero o focaccia simple. Perfecto rallado sobre platos de pasta como carbonara y amatriciana, o para disfrutar solo al final de la comida, acompañado de nueces y frutos secos para un toque final rústico y rico. Cuchillo recomendado: cuchillo almendra, ideal para romper la pasta dura y granulada del Pecorino Romano, garantizando porciones precisas sin desmenuzar la estructura.